Mittleschmerz es un término de origen alemán y significa, literalmente “dolor a mitad”. Semejante palabro se utiliza para nombrar la molestia que se presenta en el período periovulatorio, es decir, antes, durante y/o después de ovular, el cual presentan un 20% de mujeres de forma periódica.

No me gusta llamarle “Dolor” porque este fenómeno, si se produce dentro de unos parámetros saludables, no debería ser doloroso.  La molestia y el dolor no son lo mismo.

Características del Mittleschmerz

  • Suele ser unilateral, aunque no necesariamente, ya que, en los ovarios, los folículos se van desarrollando por igual en ambos lados hasta que uno de ellos se vuelve dominante y alcanza el estado máximo de maduración.
  • No es necesariamente una molesta que debamos experimentar de forma alterna, es decir, un mes en el lado derecho y otro mes en el izquierdo. Puede experimentarse durante meses seguidos en el mismo lado, ya que la afirmación de que ovulamos cada mes de un ovario es totalmente falsa ( lee aquí)
  • Se localiza en la parte baja del abdomen.
  • La duración de esta molestia va desde pocos minutos a unas horas, aunque en algunas ocasiones puede llegar a durar entre 1 y 2 días.
  • Esta molestia no necesita de intervención médica, ya que es leve y se resuelve de forma espontánea. No sería necesaria la analgesia para sobrellevarlo.
  • A veces, debido a la fluctuación hormonal que se produce alrededor del fenómeno de la ovulación, la molestia puede venir de la mano de un ligero sangrado vaginal, aunque no necesariamente.

¿Por qué se produce el Mittelschmerz?

Partimos de la base de que tanto la menstruación como la ovulación son procesos fisiológicos inflamatorios. Esto quiere decir que estos procesos están mediados por sustancias proinflamatorias, necesarias para que se produzca el fenómeno. Entre ellas, se encuentran las llamadas prostaglandinas.

Posibles causas:

  • Antes de la ovulación: El folículo dominante continua su maduración y engrosamiento produciendo una tensión en la superficie ovárica. Esta tensión puede ser la causante de la molestia abdominal.
  • Durante la ovulación: En este momento se produce la ruptura del folículo maduro para dar salida al óvulo. Dentro del folículo, aparte del óvulo, también existe un liquido seroso, el cual puede producir una irritación en el revestimiento abdominal.
  • Después de la ovulación: Las trompas uterinas, la musculatura lisa ovárica y los ligamentos se contraen para facilitar el desplazamiento del óvulo. Esta actividad está mediada por las prostaglandinas inflamatorias por lo que pueden producir molestia.

Si no hay molestia y sí dolor

El dolor nunca es normal, es verdad que las sensaciones dolorosas son individuales e intransferibles, pero si en el momento de la ovulación sentimos dolor, ya no estamos hablando de Mittleschmerz.

Por tanto, habría que descartar una causa subyacente mediante un diagnóstico diferencial. Un dolor pélvico puede estar producido por una apendicitis, una torsión ovárica o incluso una hemorragia. Las pruebas a realizar pueden ser desde una ecografía, una analítica de sangre y/o hasta una laparoscopia donde observar directamente la cavidad abdominal y detectar la procedencia del dolor.

¿Esta molestia periovulatoria se puede usar para identificar la ventana de fertilidad?

No.

No deberíamos utilizar este signo para identificar nuestra ventana de fertilidad porque es un signo bastante inespecífico y que no siempre se produce en cada ciclo.

Lo que si es útil es registrar nuestro ciclo menstrual para, si en el momento de la ovulación, presentamos esta molestia, confirmar que efectivamente está producida por el fenómeno ovulatorio.


Artículos relacionados