El Síndrome Premenstrual (SPM) afecta aproximadamente a un 48% de mujeres en edad reproductiva, las cuales presentan síntomas físicos, emocionales y conductuales que pueden interferir con la vida cotidiana.

A pesar de que existen medicamentos para su abordaje, muchas mujeres buscan alternativas no farmacológicas debido a los efectos secundarios que pueden aparecer.

La evidencia científica sugiere que la alimentación puede ayudar en la prevención y manejo del SPM, modulando la severidad de los síntomas y mejorando la calidad de vida.

¿Qué es el SPM y por qué ocurre?

El SPM se define por la presencia de síntomas físicos, emocionales o conductuales que aparecen en la fase lútea (1-2 semanas antes de la menstruación) y desaparecen al iniciarse el sangrado.

Se han identificado más de 200 síntomas, siendo los más comunes:

  • Físicos: fatiga, retención de líquidos, hinchazón abdominal, dolor de cabeza, sensibilidad en los senos.
  • Emocionales y conductuales: irritabilidad, ansiedad, tristeza, cambios de humor, problemas de concentración.

La causa exacta del SPM no se conoce, pero se piensa que las fluctuaciones hormonales, la sensibilidad a la progesterona y al estrógeno, y la alteración en neurotransmisores como la serotonina pueden tener algo que ver.

Dieta y SPM: ¿Qué dice la evidencia?

Diversos estudios han investigado la relación entre la alimentación y el SPM, llegando a la conclusión de que ciertos nutrientes podrían modular la intensidad de los síntomas.

Macronutrientes y SPM

  • Carbohidratos simples y azúcar: Un consumo excesivo de alimentos ricos en azúcares se ha relacionado con mayor irritabilidad y cambios de humor debido a la fluctuación de la glucosa en sangre.
  • Grasas: Un alto consumo de grasas saturadas y alimentos ultra procesados podría agravar los síntomas.
  • Proteínas y fibra: Dietas con mayor contenido de fibra y proteínas pueden ayudar a estabilizar los niveles de glucosa y mejorar el estado de ánimo.

Micronutrientes esenciales

Algunos micronutrientes podrían están involucrados en la reducción de síntomas:

  • Calcio: En un estudio se observó que el calcio podría reducir la severidad del SPM en un 48%.
  • Magnesio: Su deficiencia se ha relacionado con niveles más elevados de ansiedad e insomnio premenstrual.
  • Vitamina B6: Es importante porque participa en la síntesis de serotonina y su suplementación podría reducir los síntomas emocionales como depresión e irritabilidad.
  • Vitamina D: Mujeres con niveles bajos de vitamina D presentan síntomas más severos. Equilibrar los niveles podría ayudar a mejorar el estado de ánimo.
  • Zinc: Niveles correctos de zinc podría reducir la severidad de los síntomas emocionales.

Ácidos grasos omega-3

Los ácidos grasos EPA y DHA, presentes en el pescado azul y semillas de chía o lino, ayudan a modular la inflamación y mejorar el estado de ánimo.

Dieta y patrones alimentarios

Los síntomas premenstruales de las mujeres que llevan una dieta basada en alimentos frescos y no procesados, rica en frutas, verduras y proteínas magras, suelen ser más leves. Por otro lado, el consumo elevado de comida procesada, azúcares y grasas saturadas se ha relacionado con un aumento en la severidad de los síntomas.

¿Qué cambios en la alimentación pueden ayudar?

Basado en la evidencia disponible, algunas recomendaciones dietéticas incluyen:

👍 Aumentar el consumo de:

  • Alimentos ricos en calcio (lácteos, almendras, vegetales de hoja verde).
  • Pescado azul y semillas ricas en omega-3.
  • Frutas y verduras frescas para mejorar la ingesta de antioxidantes y fibra.
  • Legumbres y cereales integrales, que estabilizan la glucosa y reducen los antojos.

👎 Reducir o evitar (que no prohibir):

  • Alimentos ultra procesados y ricos en azúcares y grasas saturadas.
  • Consumo excesivo de cafeína y alcohol, que pueden empeorar la ansiedad y la irritabilidad.

Conclusión

La alimentación, combinada con un estilo de vida saludable que incluya la práctica de ejercicio físico, un buen descanso nocturno y una buena gestión del estrés, puede ser una estrategia efectiva para aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida.

La dieta debe ser adecuada y personalizada. Nosotras, como nutricionistas especializadas en salud hormonal, podemos ayudarte a encontrar la estrategia nutricional que mejor se adapte a ti.

 

Bibliografía:

  • Oboza, P., Ogarek, N., Wójtowicz, M., Rhaiem, T. B., Olszanecka-Glinianowicz, M., & Kocełak, P. (). Relationships between Premenstrual Syndrome (PMS) and Diet Composition, Dietary Patterns and Eating Behaviors. Nutrients, 16(12), 1911.
  • Robinson, J., Ferreira, A., Iacovou, M., & Kellow, N. J. (). Effect of nutritional interventions on the psychological symptoms of premenstrual syndrome in women of reproductive age: a systematic review of randomized controlled trials. Nutrition reviews, 83(2), 280–306.

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